Inteligencia emocional: cómo mantener la esperanza

En este período de nueva normalidad, buscamos la manera de mantener la esperanza, la incertidumbre sanitaria, social y económica nos invade y cómo respuesta, solo se nos alienta a encontrar la calma sin saber bien cómo gestionar esa incertidumbre y miedo.

Los seres humanos perseguimos la felicidad, gran parte de nuestra existencia nos mueve el hecho de lograr algo. En ese esfuerzo tenemos experiencias, de todo tipo, buenas y menos buenas.

En mi experiencia de las personas que acompaño, constato que no son más felices las personas que acumulan más experiencias positivas, sino aquellas que son capaces de responder emocionalmente a aquello que la vida les trae. En resumidas cuentas, no es lo que nos pasa sino cómo interpretamos aquello bueno y malo que nos pasa. Ahí está la clave para ser felices.

¿Y cuáles son las inercias que nuestra mente utiliza para interpretar esto que nos está pasando? La mente a diferencia de para lo que la entrenamos de manera espontánea, lo que hace es crear la realidad, esto explica que nuestro estilo de vida se adecúa los tipos de pensamiento que tenemos, si yo pienso que tengo una vida satisfactoria, los sentimientos que me rondaran habitualmente serán de satisfacción y plenitud, por el contrario si pienso que mi vida es desastrosa, los sentimientos que están presentes en mi mente es de insatisfacción y malestar.

Claves para aumentar y desarrollar tu inteligencia emocional

En este silogismo es imprescindible tener consciencia de que pensamientos tengo y que sentimientos me generan, y eso será la clave para que tu elección sea siempre elegir la menor opción.

¿Cómo puedo acallar aquello que mi mente me trae que me genera inquietud? Pues bien, existen numerosas estrategias para acallar la mente, para mí la más inmediata es la respiración. Es un controlador natural, que nos permite bloquear “pensamientos destructores”. Para dar paso a pensamientos posibilitadores.

Además está la meditación que está sobradamente demostrada los beneficios que reporta, eso sí, no es tan rápida como desearíamos, pero con tesón en su práctica es impresionante los resultados que obtiene. Nos permite instalar de manera constante mecanismos de control en el que cada uno decide qué pensamientos quiere potenciar por los beneficios que le reporta y que otros quiere silenciar por qué le generan desazón y angustia.

Esta práctica es la manera en la que te preparas para eliminar el miedo a lo que no puedes controlar y fomentas la fortaleza y serenidad que necesitas para lo que te pueda llegar. Así, por poco amigables que sean las nuevas realidades que nos visiten, estarás en un estado de mayor resilencia.

También te posibilitará, que te abandone el estrés, gran generador de infelicidad. Al obtener una mayor calma lograrás no entrar en los pensamientos bucle, es uno de las limitaciones más presentes a la hora de controlar los pensamientos. De manera que te será más fácil establecer prioridades y con esta claridad de mente mejorara tu presente.

Inteligencia emocional: cómo mantener la esperanza